En lo alto de una cresta rocosa que domina el curso del río Cinca y el Embalse de Mediano se alzan el Mirador de Samitier y los restos del antiguo Castillo de los Entença, uno de los conjuntos históricos y paisajísticos más espectaculares del Sobrarbe.

Desde este impresionante balcón natural, el visitante puede contemplar uno de los panoramas más grandiosos del Pirineo aragonés, abarcando los valles fluviales, las aguas azules del embalse, las sierras onduladas y, al fondo, las cumbres nevadas del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.

El Mirador de Samitier combina a la perfección historia, naturaleza y emociones fuertes, siendo una visita imprescindible para quienes buscan sensaciones únicas en el Alto Aragón.


Una atalaya sobre dos ríos

El acceso al Mirador de Samitier se realiza desde la carretera que une Aínsa con Ligüerre de Cinca. Desde allí, una pista forestal asciende hasta las proximidades del castillo, que se alcanza mediante un corto sendero.

El esfuerzo de la subida se ve ampliamente recompensado: el mirador ofrece una visión de 360 grados sobre el río Cinca, el río Ésera, el Embalse de Mediano y las montañas del Pirineo central.

Es un lugar donde el cielo parece estar al alcance de la mano y donde la grandeza del paisaje invita a detenerse, respirar profundo y dejarse llevar por la inmensidad.


El Castillo de los Entença y las ermitas de Samitier

En el Mirador de Samitier encontramos los restos del Castillo de los Entença, una antigua fortificación medieval que controlaba los accesos estratégicos del valle del Cinca. Perteneció a la influyente familia Entença, una de las más poderosas de la Corona de Aragón en la Edad Media.

Junto al castillo se conservan las Ermitas de San Emeterio y San Celedonio, construcciones románicas que, aunque sencillas, emanan una profunda espiritualidad ligada al paisaje.

Estos edificios fueron centros de vigilancia, culto y defensa, testigos de siglos de historia en una comarca fronteriza y estratégica.


Senderismo y naturaleza salvaje

El entorno del Mirador de Samitier ofrece varias rutas de senderismo que permiten descubrir paisajes espectaculares:

  • Ruta circular del Mirador y el Castillo de Samitier, de dificultad moderada, ideal para recorrer a pie la cresta y disfrutar de diferentes perspectivas del embalse.

  • Ruta hacia Ligüerre de Cinca, bajando por antiguos caminos ganaderos hasta la ribera del embalse.

  • Ruta de los Miradores del Sobrarbe, conectando Samitier con puntos como el Mirador de Mediano o las sierras de La Fueva.

Los amantes de la fotografía encontrarán aquí un escenario inmejorable para capturar amaneceres, atardeceres y cielos estrellados.


Observación de aves y biodiversidad

El Mirador de Samitier es también un lugar privilegiado para la observación de aves rapaces. En sus cielos es habitual ver volar buitres leonados, quebrantahuesos, águilas reales y otras especies emblemáticas del Pirineo.

El contraste entre el agua, los riscos, los bosques y los cielos abiertos crea un ecosistema diverso y rico, perfecto para los amantes de la naturaleza.


Un lugar para sentir el Sobrarbe

Visitar el Mirador de Samitier es mucho más que subir a un mirador: es vivir una experiencia de conexión profunda con el paisaje, la historia y la fuerza del Sobrarbe.

Un lugar que invita a la contemplación, a la fotografía, al senderismo y, sobre todo, a entender la grandeza natural y cultural de esta tierra mágica.